Australian dream.

I always wanted to visit Australia. It has been a dream since childhood and living in Hawaii made it easier to accomplish that dream (Honolulu-Sydney is 10 hours direct flight). Two of my friends joined me and our 10 days adventure began.

Sydney.

Our first stop was Sydney. We stayed there for 5 days and we got lucky to stay in one of the best hotels there- Park Hyatt. Champagne and chocolates were waiting for us in the room! We had view of the opera house and we were close to everything- the bridge, the opera house, the Rocks, George street (many bars there) and the ferry.

Our first day we took the ferry to Darling Harbor (approx $15) and the ride was amazing- beautiful weather (sunny, around 30C) and beautiful scenery (nice houses by the water and many boats). We visited the Aquarium, and on our way to Sydney tower (where you see the whole city) we experienced the busy city life in downtown Sydney. On our way back to the hotel, we stopped at a bar at Darling harbor and we had a refreshing mojito! Darling harbor is a spot with many restaurants, bars, and a movie theater and if I lived in Sydney I would probably go there a lot. I really enjoyed the atmosphere, but not the prices (cocktails were $17 and happy hour- $10). That night we went to the Opera house bar- it was crowded, people were having drinks and fun, and listening to life music (apparently the Opera bar is famous among locals on Friday and Saturday night and I definitely recommend it for a drink). We continued the night at Hugos (a bar and a club at Kings cross). Kings Cross is an area that is usually not recommended for tourists but I didn’t find anything disturbing or out of ordinarily. It’s an area with a lot of night life. The bars there are open “till late”!

The next day we took the ferry to Manly beach and we had lunch at a restaurant by the water and we took a nice walk. We didn’t stay at the beach long, may be because of the water- it was very cold, but people were still swimming and surfing! Manly beach area was cozy- like a small surf and beach town. We also went to the famous Bondi beach which was very crowded and we did a tour of the Opera house.

On our last day a friend of ours took us on a speed boat ride for 5 hours and we were able to “see” more of Sydney and its beauty. The weather was perfect and there were many people who enjoyed the sunny day out in the water. I was surprised to see a small boat that sells icecream! I have never seen that before.

Overall, I was glad I went to Sydney and I will probably go back again. I recommend it for a visit during summer (I was there February 1, and the weather was sunny all the time, approx 30C). If you do have time and you are not afraid to drive on the left side of the road, I suggest you visit the Jenolan Caves. They look amazing and I have heard only good things about them. Unfortunately, we didn’t go because none of us wanted to drive for 6 hours total. May be if we stayed an extra day….

Melbourne

Our next stop was Melbourne. Before we went there the weather was very hot- around 40C, but when we arrived it was around 20C and very windy. Locals say that you can have 4 seasons in 1 day! We experienced very cold and windy mornings and nights, and hot days…

We took the scenery hop on and off bus- it’s only $5 and it was enough to see and experience Melbourne.  From the tourist point of view, I wasn’t impressed by the city, but locals love it because it has a lot of coffee shops (it is famous for its coffee), restaurants and shops. They also say that it has a very European look, but me being from Europe, I still love and prefer Europe more.

Cairns.

Our last stop was Cairns. Australians compare it to Hawaii because it is tropical and hot all the time but to me Hawaii is much nicer! We stayed there 3 days and it was raining nonstop and very humid (summer is their wet season; locals told us the best time to visit Cairns and the reef is September and October). There were many fruit bats hanging on the trees on the streets and flying everywhere!  That was exciting to see since I never seen a bat before. They were very loud!

We took a 1day Great Barrier Reef boat tour. The tour included 2 snorkeling locations, food, drinks and introductory scuba dive. Because of the rain and the overcast, we couldn’t see the reef in its perfection but we were still able to see its beauty. Some of the corals were as big as a tree and they were very colorful. There were pretty fish, small and big, different colors. Everything that I have seen about the reef in documentaries was in front of me and it was a great experience and feeling! I definitely recommend the Great Barrier Reef for an exotic adventure!

We also took 1 day Daintree Rainforest tour (Daintree Rainforest is the oldest rainforest in the world- older than the Amazon!) We visited the Wild Habitat Port Douglas where I was able to hold a koala for only $15 and pet a kangaroo! What is Australia without seeing koala and kangaroo, right? )
Desi Stancheva, Hawaii 

Un viaje de amor a -50ºC

Cada persona viaja por motivos diferentes. El Gran Viaje de cada uno de nosotros empieza con el nacimiento. Vivimos viajando y viajamos para vivir!

Después de Marruecos y Hungría, nuestro viaje continua hasta Yakutsk, uno de los sitios más fríos del planeta. Un viaje, guiado por el sentimiento más poderoso del mundo, el amor.

Conocí a Boiko en el año 2001, una de estas personas que no se separa nunca de su sonrisa. Un tipazo de estos que son todo corazón. Un gran fan del Bayern de Munich (hasta su cepillo de dientes lleva el escudo), y también de la buena cerveza.

Empezaba todas las mañanas en el bar tomando café y repasando los periódicos. Los fines de semana siempre estaba en todas las fiestas, desde que abrían hasta que echaban el cierre y salía el sol. Hay muchas historias que contar, pero no es ahora el lugar. Tuve la oportunidad de formar parte del grupo en algunas de estas salidas de ''solo hombres'', y como era la única mujer, no les molestaba demasiado. Fui testigo de aventuras, peripecias y conversaciones entre ellos que, como poco, serían inimaginables. Las mujeres eran, para ellos, algo distinto, provenientes de otro planeta, un enemigo al que odias, no entiedes y, a la vez, necesitas, como al agua.

Boiko no era el único que no encontraba a esa chica a la que poder llevar de la mano sin tener tener vergüenza, con quien compartir algo más que noches de juerga.

Pasaban los años y convirtieron a Boiko en un viajero, en busca de algo que no encontraba. Conoció a personas de mil y una culturas y tradiciones, aprendió idiomas, encontró amigos, pero no lo que quería. Un día, me comunicó que se iba. El lugar, Yakutsk, pensé que estaba en las Galápagos. Qué equivocada estaba!

RUSIA! Entre Siberia y Kamchatka, se encuentra Yakutsk. Las temperaturas inician el descenso en septiembre y no experimentan una subida hasta mayo. En enero la temperatura media es de -34º, pero se llegó a alcanzar el récord en los -81'4ºC. Brrrrrrr! La mayoría de los 200,000 habitantes vive de la industria minera, aunque también podemos encontrar teatros, museos y hasta un zoo.

El motivo del viaje, como no podía ser de otra manera, era una chica. Sí, yo no lo podía creer. Alguien capaz de dejar a la familia, los amigos, el sol... los partidos del Bayern y la cerveza. Qué puede cambiar tanto a una persona?

Dones de viatge os dará un consejo: cuando preparéis la maleta, nunca olvidéis poner un poco de amor, porque no hay mejor compañero de viaje!

Budapest, ciudad de ciudades.

Hace unos días recordé que ya van cuatro años. La mayoría os preguntareis, cuatro años de qué? De uno de los mejores viajes de mi vida. He tenido la suerte de que me concedieran alguna que otra beca para salir al extranjero, entre ellas, la Comenius. Y para que no se quedara solo en eso, se la concedieron también a todas mis amigas. Así, en febrero de 2010 nos embarcamos en una aventura sin igual: descubrir la cultura magiar y sus portadores.

Llegamos después de mil horas de avión, heladas como pollos y un tanto cansadas. Subimos en una especie de minibús con nuestros amigos, compañeros y guías para esos cinco cortos días. 50 km nos separaban del lugar que íbamos a habitar: Esztergom. Encantadora, nevada, fría y con monumentos y lugares en perfecto estado de conservación, como su basílica. Un lugar bañado, como no, por el imponente Danubio. 

Pero dejando de lado la emoción que me embargaba en esos momentos y que hacía que mis ojos parecieran naranjas, grandes y redondas, y que hace ahora que mi opinión sea poco objetiva; he decido centrarme en Budapest, capital de capitales.

Nada más llegar, el viento del este nos da la bienvenida. Los húngaros se ríen, acostumbrados como están a ese frío seco. Hasta la nieve es diferente, blanda, fina, ligera, sorprendente. Dividida en dos por el gran río, llaman mucho la atención las islas habitadas en el centro del mismo, pero lo hace aún más su larga historia repleta de reyes y nobles. Es por eso de obligada visita la Plaza de los Héroes, situada al final de la avenida Andrássy, todo ello Patrimonio de la Humanidad. A los actuales habitantes de la antigua Corona de Aragón les interesará saber que allí se encuentra la estatua del padre de la reina Na Violant, esposa del rei Jaume I (recuerdo que hicimos que los chicos averiguaran toda la historia para contarla en el instituto cuando regresáramos).

Siguiendo las indicaciones de aquellos que conocen la ciudad, nos dirigimos hacia la ciudadela, desde donde se pueden observar las dos antiguas ciudades que ahora conforman la capital: Buda y Pest. Tejados blancos, paraguas cubriendo largos y pesados abrigos, orillas congeladas. Todo se observa desde allí, también nuestra próxima parada: el Parlamento. Con las paredes recubiertas de oro y mármol, se alza a orillas del Danubio, como la gran mayoría de edificios importantes del lugar.

Para nuestra desgracia, la noche acaba por caer y nos obliga a subir al autobús para regresar al hotel, no sin antes concedernos el placer de observar el Puente de las Cadenas, armado de luz hasta la última piedra. Una escena que queda gravaba para siempre en todos y cada uno de los espectadores que tuvo, tiene y tendrá esta ciudad de ciudades.

Recuerdos y sentimientos con los que es imposible contener la sonrisa. Seguro que me entendéis! Y si, al igual que nosotras, necesitáis compartirlo con el mundo, ya sabéis donde hacerlo.

donesdeviatge@gmail.com